Esta encantadora figurilla de los años 50 representa a una niña en una pose juguetona con un ciervo. Hecho por la Fábrica de Porcelana de Wallendorf y diseñado por Heinz Schober, este objeto de colección muestra delicadeza en los detalles y una artesanía delicada. Una pieza de colección encantadora que puede convertirse en el centro de conversación en cualquier colección de porcelana.